Andrés García recordado ser uno de los galanes de las telenovelas del ayer y por ser uno de los hombres sin pelos en la lengua ante espectáculo con un temperamento muy fuerte, comprobado por los conductores de un programa de espectáculos en Argentina,pues el actor explotó contra los presentadores y hasta abandonó la entrevista.
Hace unos días, durante una entrevista para el programa Confrontados del canal nueve en Argentina, Andrés García fue entrevistado en vivo para poder continuar con una investigación que llevan en ese país respecto a la desaparición de Marcela Bastieri, madre de Luis Miguel.
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La entrevista en sí comenzó con varios incovenientes ya que “El Comandante” García comentó desde el inicio que había bastante interferencia y que le costaba trabajo oír a Marina Calabró.
Posteriormente entablando la conversación respecto al tema, la conductora le hizo la pregunta a medias, refiriéndose a que si en algún momento Luisito Rey le pidió ayuda para la muerte de Marcela, a lo que interrumpió la entrevista para callar a su perro que no lo dejaba escuchar la transmisión.
Ante esa reacción, a los conductores del programa les pareció bastante gracioso que Andrés García mandara a callar a su perro pero ésto fue lo que detonó la bomba que se había visto venir desde el inicio de la entrevista.
Andrés cambió su semblante inesperadamente y decidió cuestionar a los conductores sobre lo que les causaba gracia. Cuando ellos le contestaron que se reían de la forma tan chusca en la que había mandado a callar a su perro, el actor estalló en cólera.
“¡A mí no me gusta que se rían de mí, vámonos entendiendo! Los payasos esos que están hablando ahí… ¡Hablo en serio! ¡A esos pendejos no los quiero ahí o se acabó la entrevista! A reírse de su mamá”.
Después de arremeter contra el equipo de Marina Calabró, Andrés García terminó súbitamente la entrevista y dejó a los conductores y al público atónito por la forma en la que se comportó.
Hasta ahora, no se sabe el motivo de la reacció de Andrés García, pero se rumora que es por que lleva una vida de ermitaño alejado de todo y que, incluso, ha cortado lazos muchas personas, tanto así, al punto de pedirle el divorcio a Margarita Portillo tras 20 años de casado.